Gamificación. Una herramienta poderosa también en selección

Y es que, en el fondo, y por suerte, nos queda un poco del niñ@ que fuimos. Y es que gran parte, por no decir todo, del aprendizaje de nuestra infancia está hecho a través del juego, hasta que un día se decide que eres mayor y el aprendizaje … bueno digamos que más monótono... y cuando somos adultos y de repente aparece de nuevo este formato, por ejemplo, en un proceso de selección ¡entramos de lleno! porque forma parte de nosotros.

¿A quién no le gusta jugar?, juegos de mesa, juegos outdoor, juegos online con avatares, simulaciones etc. De hecho, no es casualidad que la industria del videojuego tenga tanto éxito.

Dentro de toda esta catarsis que se ha producido, se ha reforzado algunas tendencias que ya tenían bastante tirón antes del Covid-19. Hablamos de la gamificación, como una herramienta clave para la formación y también para la selección.

Nada mejor para ver cómo se comporta realmente una persona que poniéndole una situación con la que interactuar con otros y ver cómo la desarrolla, cómo se comunica, cómo colabora, cómo lidera. Una buena forma de “ver” más allá del CV, de los tests y la entrevista.

Ventajas del juego para reclutadores y candidatos

Para reclutadores

• Análisis de varios candidatos a la vez: es una buena forma de seleccionar en la tríada final de candidatos, por ejemplo. Verlos en acción en un juego de roles quizás nos ayude a ver matices que de otra forma nos sería más difícil apreciar.
• Buena experiencia del candidato: en una época en la que el employer branding y el employee experience han tomado gran relevancia, no podemos olvidarnos de la experiencia del candidato. Y si hay algo que todo candidato ansía es salir de un proceso con “Buen sabor de boca”. Lograr ser atractivos desde el mismo instante de la selección puede ser determinante para que seamos elegidos por los mejores talentos.
• Acercarnos a través de una simulación al despliegue de destrezas “real” que posee el candidato: y es que fingir y “actuar” durante el tiempo que dura una simulación o juego, cuando realmente nos sumergimos en ella, es complejo, a no ser que seas un actor profesional.

Para Candidatos

• Una buena experiencia que sumar a nuestro bagaje: sin duda tener experiencias enriquecedoras contribuye a nuestra expansión creativa y emocional, es un aprendizaje más a poder “utilizar” a nuestro favor en el futuro.
• Autoconocimiento: algo en lo que todos debemos seguir trabajando y el juego por su capacidad de inmersión siempre nos revela cosas de nosotros mismos en las que conviene seguir indagando… miedos, limitaciones, momentos de brillantez etc.
• Mayor despliegue de destrezas: Una experiencia gamificada puede permitirnos “entrar en modo juego”, mimetizarnos con la situación y darnos la oportunidad de que vean en nosotros aspectos que no es fácil aflorar en una entrevista o un test y mucho menos plasmar con palabras en un CV.

Entonces… ¿Jugamos?